En quince días estaremos en primavera, no es que haya sido un invierno duro, de hecho está siendo un invierno muy primaveral con máximas de 24 grados y mínimas de risa, pero el alargamiento de los días me activa, mucho, demasiado, hasta que la guita se rompe y me atrapa la astenia primaveral. Como me pasa todos los años que debería de haber aprendido de esta experiencia vital, pero como humana que soy tropiezo en esa piedra, no dos veces como reza el refrán, sino todos los que sean menester. Encima de mi mesa de trabajo tengo por un lado los 14 patrones de un pedido muy especial, por otro los patrones y la tela para una falda lápiz, la tela para un vestido de flamenca, una capa a punto de acabarla y los patrones para otro traje de flamenca. La capa la entrego mañana así que continúo cosiendo el pedido especial, que en estar acabado me dejará tiempo para los trajes de flamenca y la falda. Como esto no era suficiente, a ratitos, mientras preparo la comida o la cena me ha dado por arreglar las juntas de los baldosines del baño, sí, leéis bien, "poniendo monas" las juntas, no tengo suficiente con tener una casa que gobernar, compra que hacer y lavadora que tender, estoy arreglando las juntas del baño. También he encontrado tiempo para volver a hacer deporte, esto no me lleva mucho tiempo porque al estar muy oxidada tengo que acabar pronto para que no me de un yuyu, he hecho limpieza ropil de armario, me he cortado el pelo, por no hablar de la cantidad de cosas que me rondan por la cabeza, tanto de la casa y la temporada que viene como de la nueva colección para este verano, voy a sesiones de 10 horitas todos los días... a ver cuánto me duran las fuerzas : D
Currando, currando